lunes, 14 de diciembre de 2009

AL capitulo VI

(Especial de navidad)

Se hizo de noche desde que salí del hotel y esta helando, puedo ver como sale el vapor de mi boca dibujando amorfas figuras en el ambiente, me encuentro con el alma enrarecida por todo lo que me conto el tipo en la habitación, y me preguntaba dónde estaría “el pancho” cuando de pronto alzo la mirada y veo un gran ventanal adornado con luces de navidad.

Me quede atónito por la manera en la que había pasado el tiempo y que sin pensarlo había llegado a diciembre, continué mi camino de vuelta a mi casa pensando en las navidades que había pasado junto a mi familia y en cuanto los extrañaba, estaba tan absorto en mis pensamientos que no escuche los pasos apresurados de una chica que al correr tropieza conmigo y casi me manda al suelo.

Ella solo trastabillo y siguió corriendo y atrás de ella iban dos tipos bastante mal encarados, supuse que eran pandilleros o algo por el estilo, di un par de pasos más y me quede parado, di la media vuelta y camine en la dirección que corría la chica, supuse que algo malo iba a suceder, de repente escuche un grito muy cercano, al doblar la esquina me lleve la sorpresa de que los dos pandilleros estaban golpeando a esta mujer de una manera salvaje.

Camine hacia ellos y les grite- ¡qué les pasa, dejen a esa chica en paz!- ellos voltearon y me dijeron – te largas a la chingada o te mueres-, yo pensé “bien” saque mi arma de debajo de mi gabardina y le metí un tiro en la cabeza, su sangre quedo esparcida por todo el lugar, la chica el otro pandillero se quedaron inmóviles, el otro pandillero apenas vi que movió su mano le disparé en el hombro, dio la media vuelta queriendo huir y le volví a disparar en la pierna.

Cayó al suelo como el animal que era, guarde mi arma y me acerque con toda la tranquilidad del mundo, la chica solo estaba ahí tirada en el suelo sin decir nada, como agradeciendo su fortuna, me acerque y le pregunte si estaba bien, a lo que me dijo que si, levante la mirada y vi al pandillero retorciéndose de dolor, camine hacia él y le pregunte porque estaba persiguiendo a esa chica y dijo que porque le debía dinero, que ella era una drogadicta que no merecía vivir.

Metí la mano y saque un cigarrillo, lo encendí y le ofrecí un cigarrillo al pandillero, el me lo acepto, se lo puse en la boca y se lo prendí, con una voz tranquila y calmada le comente – mira hermano, tu y yo somos muy diferentes y te voy a decir el porqué, tu matas para cobrar deudas o simplemente porque el sujeto que es tu jefe te manda, no crees que es una manera muy estúpida de vivir?, ahora veámoslo desde el punto de vista lógico, ya establecimos que tu estilo de vida es un tanto estúpido por lo cual una vida estúpida no merece ser vivida así que basado en esto, tu no mereces vivir.

El me miro pensativo y curioso de ver a qué hora sacaría mi arma y lo mataría, realmente esto me divertía mucho así que seguí torturándolo psicológicamente, así que seguí platicándole – mira no son mis asuntos y la verdad es que me importa un comino lo que le llegue a pasar a esta chica así que vamos a hacer un trato si tú me respondes bien una pregunta te dejare vivir para sigas revolcándote en tu mierda hasta que alguien te mate, pero si me respondes una estupidez morirás aquí, así sin más.

Pude ver en sus ojos la resignación a la muerte y le pregunte – a ver haz un poco de memoria y dime una sola cosa buena que hallas hecho en toda tu vida – se quedo pensativo, me miro y dijo – creo que no hay nada bueno en mi vida – bueno entonces te voy a matar pero antes le vas a pedir disculpas a esta mujer por golpearla de una manera salvaje y si no lo haces tu muerte no será rápida y te juro por lo que más quieras que desearás no haber nacido.

Lo arrastre hasta donde estaba ella y le pedí que le pidiera disculpas – solo atino a decir un sórdido "perdóname no era nada personal" – lo arrodille y le dije a la chica que si quería podía mirar saque mi arma cote cartucho y le dispare en la cabeza, el disparo sonó como un susurro en la noche fría.

Guarde mi arma y me fui caminando, la chica se paro como pudo y me grito que esperara un poco, yo me di la media vuelta y le dije que no quería hacer amistad con nadie que se ocupe de sus asuntos y que me dejara en paz, ella se sentó y me pidió que por favor la ayudara estallando en llanto, me le quede viendo mientras pensaba “bueno cualquier cosa tiene consecuencias, estas con las mías”.

La ayude a levantarse y nos metimos a un restaurante modesto, ordenamos algo de cenar y ella me platico sus problemas de adicción a las drogas, prostitución, y otras porquerías que realmente me conmovieron y pensé en mi pequeña hija, le pedí que se callara y le ofrecí una salida a todo eso, ella me miró sorprendida, porque es un hecho que nadie hace nada sin recibir nada a cambio.

De tal manera que le hable de un centro de rehabilitación y que yo con gusto se lo pagaría a cambio de una cosa, el objeto más valioso que ella tuviera, enseguida saco un broche de oro, me quede sorprendido por lo hermoso del broche, ella me dijo – señor yo no sé su nombre pero si tuvo el valor y la decencia de salvarme la vida y no hacerme daño creo que son razones suficientes para confiar en usted, le entrego este broche que era de mi madre que heredo de su madre, tómelo como pago.

Yo tome el broche, lo levante y con una mirada fija le conteste – yo tampoco se tu nombre, pero esto no es un pago, es una promesa de que vas a regresar por él como una persona diferente, y entonces te lo devolveré - , dejamos de hablar y solo se escuchaba el sonido de los focos de luz blanca dentro del local y a la vez se respiraba un aire de tranquilidad.

Esa noche volvimos a mi departamento, le sugerí que se bañara para curarle las heridas que había sufrido y así lo hizo, al curarle las heridas me di cuenta de que esta chica todavía tenía salvación, la acompañe hasta la habitación donde se metió en mi cama y antes de retirarme del cuarto le pregunte su nombre y edad, ella me respondió que se llamaba Lucia pero que podía llamarla “Lucy” y que tenía 18 años, me pregunto lo mismo y yo con voz dulce le respondí que mi nombre era “Al” y que mi edad no importaba.

Al día siguiente la desperté y la lleve a un centro de rehabilitación donde sabia que la tratarían muy bien, una vez en la puerta me dijo que yo era su ángel guardián, me beso en la mejilla y cruzo las puertas donde la recibieron amablemente, di media vuelta y me fui caminando.

A la mañana siguiente me llamó Loreta para saber cuáles eran mis planes para la navidad, le respondí que no tenía planes y me propuso cenar juntos en la navidad a lo que yo accedí gustoso.

sábado, 25 de julio de 2009

SIEMPRE FELIZ


Una vez más me levánto temprano con el tintineante ruido del despertador que esta mañana me resulta particularmente molesto, aún no amanece y puedo ver como la tenue luz de la del candil de la calle entra por mi ventana, hasta cierto punto es tranquilizante verla, es blanca y reconfortante y pienso cuan afortunado soy de ver ese fulgurante resplandor en mi ventana que me ha dado seguridad cada maldita mañana desde hace 20 años.
Tomo mi toalla y me meto a bañar, me veo en el espejo, noto mi desaseada barba y me doy la oportunidad de no afeitarla porque no me dio la gana, me percato de que mi pelo esta todo alborotado por la horrible noche que pase revolcándome en la cama, abro la regadera y el agua esta tibia como esa sensación que uno tiene de pequeño al acomodarse en el regazo de su madre.
Me tardo en la ducha, al salir el contraste de temperatura es lo que me acaba de despertar y me apresuro a llegar a mi cuarto porque es una mañana fría, me pongo un traje para ir al trabajo y mientras me visto me puedo dar cuenta que mi traje está un poco maltratado y algo percudido por el uso, es chistoso pero en 5 años que llevo usándolo no lo había notado, asá que termino de arreglarme tomo mis cosas y salgo de casa.
Al salir el frio se siente bien en la cara es una sensación que me alivia y deveras lo disfruto, pienso que soy un tipo afortunado porque tengo la dicha de tener el trabajo a unas cuantas cuadras y mientras voy caminando pienso en toda la gente que tiene que manejar hasta 3 horas para llegar el trabajo y que en estos días una sino es que la mayor felicidad es tener el trabajo cerca.
Llego a la oficina y una vez más veo a mi jefe que esta con una ceja levantada y el llevar tanto tiempo en este trabajo se aprende a conocer a sus superiores y uno puede saber que al tener la ceja levantada está de malas, no tengo la menor idea de porque, me permito divagar unos minutos acerca de la causa de su mal humor, pensando que tal vez su amante lo mando al diablo o se le descompuso el coche de camino al trabajo, pienso que es un poco patético que una de las pocas diversiones en mi vida es figurarme porque está enojado mi jefe.
El se me acerca molesto y me dice por que llegué tarde, veo mi reloj y noto que faltan 10 minutos para las 7 que es la hora a la que entro a trabajar, lo miro desconcertado y pienso que no tiene sentido molestarme o entablar una pelea con él, me da el trabajo del día y yo me siento en mi cubículo, prendo mi computadora que he visto desde hace 5 años y precisamente hoy la veo más bonita, saco una franela y la limpio del polvo que se le acumulo el fin de semana.
De repente levanto la mirada y ahí está Paty, la secretaria del jefe, la mujer de la que estoy enamorado y nunca me he atrevido a decírselo, ella me mira y me sonríe pícaramente yo le contesto con un buenos días, enseguida me siento en mi sillón y me pongo a trabajar delante de mi computadora y pienso en la extraña coincidencia que no he tenido sexo en cinco años, los mismo que llevo con mi computadora en la oficina, me miro en un espejo y veo que mi juventud está empezando a dejarme.
Puedo ver un par de canas, un par de arrugas, mis manos se ven maltratadas y me da tristeza haber dejado atrás mis mejores años y pienso que así debe ser la vida de un adulto un tanto aburrida, repetitiva; trabajando por un salario miserable, viviendo en un departamento con hijos, tener un coche, una esposa….a resumidas cuantas el sueño americano, el detalle es que no estamos en estados unidos, esto es México la tierra del “no se puede”, del “está muy difícil”, del menor esfuerzo, y me doy cuenta de la mierda en la que me revuelco y me resulta cómodo, creo que eso es lo peor de todo y me siento feliz con eso, por la idea de pensar que hay alguien más jodido que yo o en las mismas y se me viene a la cabeza un dicho que decía mi padre “mal de muchos, consuelo de pendejos” y pienso cuantos pendejos como yo habrá en el mundo o nomas en México.
Es hora de comer y en la cafetería están sirviendo enchiladas, un platillo que me encanta desde niño, las disfruto con tanta alegría que casi puedo sentir como me regresa la energía al cuerpo, regreso a mi cubículo a seguir trabajando, ya son las 6 de la tarde y termino temprano, le doy todo mi trabajo del día a mi jefe y me dice “buen trabajo, terminaste pronto, si quieres ya puedes irte”; en cuanto escucho eso salgo como de rayo, me despido de Paty deseando que sea mañana para volverla a ver.
Llego a casa, abro la puerta y de repente mi casa se ve tan vacía, pienso que he comprado todas esas pendejadas tecnológicas según yo para alardear con mis amigos y me doy cuenta que hace tres años que no veo a mis camaradas de juerga o por lo menos invitar a alguien a comer a la casa, me da tanta flojera lavar los traste que apenas son un vaso y un plato que ya hasta esta cuarteado porque es el que siempre uso.
Me preparo algo de comer porque ya tengo que ir a dormir sino las consecuencias de llegar tarde mañana serian gravísimas, me pongo mi piyama me lavo los dientes y me hecho a dormir, caigo como piedra rendido de cansancio, ya dormido sueño con mi propia muerte que resulta en un trágico choque automovilístico, despierto perturbado y sudando con el corazón latiendo como un loco me tranquilizo e intento conciliar el sueño una vez más sin éxito.
Al levantarme una vez más vuelvo a tener la misma rutina pero ahora molesto porque no había dormido bien la noche anterior, otra vez llego temprano al trabajo y ahí está el jefe otra vez molesto diciéndome porque he llegado tarde yo lo miro duramente como retándolo, y el solo deja caer los papeles como diciendo deja de hacerla de pedo y ponte a trabajar y así lo hago.
Para las 11 de la mañana llega Paty tan fresca y resplandeciente como nunca ella me vuelve a sonreír como de costumbre y yo le contesto con un buenos días como siempre, en seguida se aproxima a mi cubículo y me pide que valla a la oficina del jefe, una vez ahí él tiene mi expediente en la mano y un cheque de liquidación y sin más me dice “sabes que, esta compañía funciona como una gran familia feliz, y yo no te veo muy feliz así que vacía tu cubículo y lárgate a tu casa”, yo tomo mi cheque de liquidación y me dirijo a mi cubículo, me quito el saco, aflojo mi corbata y me recargo en mi sillón pensando que voy a hacer ahora.
Cierro los ojos y al abrirlos veo más claro como en cámara lenta, puedo ver a Paty muy apurada yendo de aquí para allá en la oficina, a mis demás compañeros abnegados en sus computadoras, el sonido de las teclas de sus teclados de computadora se escuchan como un martillo hidráulico, decido pararme con fuego en el corazón y la mirada encendida, voy decidido a tomar el control de mi vida el cual no lo tengo desde que nací.
Me dirijo a Paty y le digo hola, sabes desde hace 10 años que trabajo aquí te he visto y estoy enamorado de ti, la verdad no me importa si tienes novio o estas casada, la tomo entre mis brazos y la beso con toda la emoción del mundo, mi corazón late fuerte y puedo sentirlo, es una emoción que me vuelve loco, ella se me queda viendo desconcertada y me dice que también yo le gusto y que la manera que se lo dije es un tanto repentina pero que le gustó y que estaría encantada de tomar una taza de café yo amablemente le contesto que sería genial.
Me quito el cinturón y me meto a la oficina del jefe lo envuelvo en mi mano y lo utilizo como bóxer sin decir nada le propino tremendo golpe en el rostro que lo tira en el suelo, en seguida me le echo encima como perro rabioso y lo golpeo hasta que me pide que lo deje en paz, que ya le pare, hasta ese momento yo le paro, levanto la mirada y les pregunto con una sonrisa en la cara y los ojos grandes ¿Qué están viendo? ¿Saben quién soy? ¿Saben cuál es mi nombre?Lo que ven es su rostro, ven el mundo a través de mí, yo soy ustedes, soy su antipatía, soy sus deseos más profundos y oscuros, soy lo que no se atreven a decir, soy el estudiante que maldice a su profesor, soy el obrero enojado con su jefe, soy la maestra que odia dar clases, soy lo que todos piensan y nadie dice en voz alta, y mi nombre…...es difícil decirlo porque mi nombre es el de cada uno de ustedes.

sábado, 18 de julio de 2009

AL capitulo V

La humedad y el olor a sangre no se me puede quitar, me duelen las manos de torturar a Larry estoy cansado y tengo un poco de sueño, hace 20 minutos que Larry se desmayo y no me sirve de nada si esta inconsciente así que procuro amarrarlo muy bien y me voy a la cama.
Me acuesto y trato de conciliar el sueño y lo logro por un momento pero ese maldito letrero no me deja dormir, me levanto me visto y me voy a tomar un trago al bar más cercano estoy tomando un poco de whisky cuando suena mi celular y para mi sorpresa se trata de Loreta, contesto y me dice que no puede dormir y le digo que venga a donde estoy, media hora después llega al bar tan fresca y radiante como el día que la conocí, ella pide un Martini de manzana me mira profundamente y me dice, ahora te creo todo lo que me contaste acerca de tu familia y de Larry.
Yo la miro y rio sarcásticamente, doy otro trago a mi bebida y me pregunta – donde esta Larry?-, yo le respondo que está en mi casa atado e inconsciente, me mira asombrada y le digo que en este momento no le darían ganas de verlo porque no podría dormir en un mes.
Nos quedamos en el bar hasta el cantinero nos anuncio que ya era hora de cerrar, pagamos la cuenta y le ofrezco ir a mi departamento para que pueda descansar un poco, al llegar a mi departamento Alastor me está esperando en la sala, ella sorprendida se queda atónita ante la presencia de aquel sujeto, yo calmado le digo que es un conocido de confianza, después de hacer las debidas presentaciones me entrega un sobre negro como de costumbre y se esfuma.
Loreta no da crédito a lo que acaba de ver y me pide un trago para poder sobrellevar la emoción, enciendo otro cigarrillo y curiosa me pregunta acerca del sobre y cuál es su contenido, le contesto que es una orden de asesinato que viene directamente del diablo.
Se reclina sobre el sillón, suspira y me dice, - wow en verdad eres todo un personaje verdad, al lo que respondo – pero claro que no, solo soy un peón en su macabro juego, pero no me importa en tato me deje llevar a cabo mi venganza-, me siento a su lado, la abrazo y le digo que se vaya a recostar a mi cama, ella asiente con la cabeza y se va a mi cuarto, yo me quedo acostado en el sillón y finalmente me quedo dormido.
Al día siguiente me levanto del sofá y voy a mi cuarto donde Loreta está profundamente dormida, me doy media vuelta para ir a ver a Larry que se encuentra despierto y al verme se pone pálido y empieza a temblar nuevamente, le digo con voz calmada – mira te voy a quitar la mordaza para que me respondas lo que quiero, si gritas la cosa se va a poner fea como ayer y si no gritas pues todos vamos a estar tranquilos-, Larry asiente con la cabeza y le quito la mordaza y le pregunto – quien es la rata grande y gorda? y donde la encuentro; si decides no decirme por lealtad sabes que él te va a buscar y te va a matar y si decides decirme tu muerte va a ser muy rápida de cualquier manera ya estás muerto.
Me mira y me dice donde encontrarlo y me dice que su nombre su apodo “el pancho” le pregunto cuál es su nombre pero no lo sabe y le creo porque se nota el terror en su rostro, lo amordazo otra vez y me dirijo a mi cuarto para buscar ropa limpia y darme una ducha, una vez que entro para mi sorpresa Loreta esta despierta y me mira como si fuera un extraño, lo único que atino a decir es buenos días y le pregunto cómo durmió, ella me responde que es la mejor siesta que ha tomado.
Interrumpo mi idea de tomar un baño y me voy a la cocina a prepararle un almuerzo, momentos más tarde ella se levanta de la cama y se dirige al comedor donde estoy sirviendo la comida, se sienta y almorzamos juntos un rato después de almorzar en silencio me levanto y le digo que tengo que ir a tomar una ducha, me meto a la regadera y escucho como entra a la habitación y se empieza vestir, salgo de la duche y ella está sentada en la cama, me mira y me dice, - gracias por salvarme la vida, eres un hombre maravilloso, ven y siéntate a mi lado-, me mira pero ahora de una manera tierna, acaricia mi cara y me besa.
Hacía mucho que no sentía los cálidos labios de una mujer, es una sensación muy reconfortante, después de que me besa me dice que es hora de que vaya porque tiene que ir a trabajar y me dice que puedo confiar en ella ahora más que nunca la acompaño a la puerta, pide un taxi y se marcha, antes de que se subiera al taxi le pido que me avise cuando llegue a su casa y que si sospecha de alguien o de alguna cosa que me marque de inmediato o que se ponga en camino a mi casa.
Ella sonríe, se sube al taxi y se marcha, de regreso a mi habitación me doy cuenta del sobre que me entrego Alastor la noche anterior, lo abro y para mi sorpresa solamente dice entre comillas “el pancho”, aviento el sobre y me pongo en marcha al hotel en el centro de Coyoacán en donde me dijo Larry que podía encontrar al pancho.
Una vez que llegue me aproxime a la recepción le enseñe mi arma al sujeto que atendía ahí y le dije – donde está el pancho, me lo dices ahorita o en vez de matarlo a él te mato a ti-, el tipo nervioso me dijo que estaba en la suite del 5º piso, tome el elevador y subí hasta ahí, toque la puerta y me abrió un tipo flaco y alto, apenas me dejo verle la cara le apunte con el arma y le dije – donde está el pancho-, el me respondió que ya se había marchado hacia su asa en el pedregal.
Le pedí amablemente que se sentara y me platicara acerca de él, comenzó diciéndome que controlaba casi todo el crimen organizado del distrito federal y que tenía una extraña afición por bañarse en la sangre de muchachas vírgenes porque según él le daban poderes sexuales y sobrenaturales.
Por un momento pensé que lejos de que el asesinato de el pancho fuera una orden del diablo, lo iba a matar por el puro gusto de hacer a este mundo un lugar mejor para las vírgenes que todavía querían seguir viviendo.
Lo único que pude hacer fue decirle al sujeto que me platico todo esto fue dejarlo atado de pies y manos y sujeto a la cama y antes de salir de la habitación le dije –si lo que me dices es mentira voy a regresar y vas a desear no haber nacido-, e respondió que todo lo que me decía era verdad y que por favor regresara por el.Baje al lobby y le dije al sujeto que atendía ahí que no molestaran en la suite y le page 500 pesos más por las molestias del hospedaje y el asalto nervioso al que había sido sometido.

miércoles, 18 de marzo de 2009

kill the poo IV

Critopher robin se levanto temprano un miércoles tomo su viejo bat, le puso clavos y se vistió, subió a su azotea y con sus binoculares observo en dirección al bosque, alcanzó a ver a cerdito dando un paseo con burro, ellos se veían igual de jóvenes como en aquella ocasión.
En ese momento se escucho una voz que decía – hola, ahora madrugaste- el respondió –sí, esa voz era de lion y Cristopher Robin le dijo -sabes que, ya me canse de llamarte Lion, ahora te voy a llamar Jack, el respondió que estaba bien, al fin y al cabo tu me creaste.

Los dos siguieron observando, mientras Cristopher Robin pensaba en un plan para tomar venganza, pensó en llamar al turco y a la rusa pero lo descartó en seguida por que él quería la gloria para él solo, empezaba a oscurecer y cristopher robin bajo de la azotea, salió de su casa llevando consigo su viejo bat y se dirigió al bosque.

Con mucho sigilo fue a la casa de puerquito la cual tenia las luces apagadas y pensó que tal vez no estaba o ya estaba dormido, reviso si la puerta estaba abierta y lo estaba, así que se metió a la casa de puerquito, puerquito todavía no había llegado, de repente escuchó que tocaban la puerta y se escondió, lentamente se fue abriendo y entre sombras pudo ver que era el guardabosques que dijo- ¿puerquito?, dejaste tu puerta abierta, creo que no está, pasare a prepararme un té como a veces acostumbro- el guardabosques se dirigió a la cocina, tomo una taza, saco un te de limón y de dispuso a beber cuando de repente se volteo y vio a cristopher robin de frente, tiro la taza de té, iba a sacar su arma pero en ese momento cristopher robin le pego con su viejo bat en un costado.

El guardabosques callo del dolor, cristopher robin lo levanto, tomo una silla y lo sentó, después de que lo amarro lo amordazó, le dio un par de golpes para dejarlo inconsciente, al cabo de una media hora llego puerquito todo ebrio y drogado; al ver al guardabosques bañado en sangre se le bajo lo ebrio y lo drogado, quiso salir de su casa a pedir ayuda pero no pudo porque cristopher robin lo estaba esperando en la entrada, de la desesperación no lo vio, solo sintió el golpe en la cara y cayó al suelo, cristopher robin lo amarro y amordazo.

Arrastro al guarda bosques y a puerquito a su vieja casa, los metió al sótano y los dejó ahí, subió a la cocina y comió cereal con fruta, se puso ropa mas cómoda, fue a leer al sillón de la sala, una vez que empezó a escuchar ruidos bajó al sótano y vio a los dos que ya habían vuelto en sí.

Y le dijo- soy cristopher robin malditos hijos de puta y estas son las reglas del juego, por cada respuesta estúpida los golpeare…en el mejor de los casos, quien fue el primero que se dio gusto conmigo esa noche hijos de puta, solo muevan la cabeza-, puerquito no hizo ningún movimiento y tampoco el guardabosques.

Cristopher robin alzó su bat y le rompió la pierna al guardabosques de un solo golpe, puerquito horrorizado de ver tanta sangre, el dolor y la desesperación del guardabosques empezó a llorar, al escuchar los sollozos critopher robin se dio la vuelta le sonrió de una manera tan malvada a puerquito que éste dejó de llorar.

Camino un par de pasos hacia donde estaba puerquito y le dijo – tengo una idea mejor, vuelve con los animales del bosque y diles que Cristopher Robin ha regresado y no hay escape, ¡todos ustedes morirán en mis manos!

Después de decirle tal cosa sele propino tremendo golpeen la cabeza que lo dejó inconsciente, regreso con el guardabosques que estaba todavía horrorizado de la brutalidad que le habían hecho, Cristopher Robin arrastro una silla y se quedo largo rato mirándolo fijamente, recargó su bat en la pared y tomó un viejo machete que estaba oxidado y mellado por el tiempo.

Camino hacia el guardabosques con machete en mano y sin decir nada le tomo uno de sus brazos y lo cercenó con singular alegría enseñándole su brazo lo aventó a una tina para luego cortarle la pierna ya rota, entre mas gritaba y se retorcía el guardabosques más placer sentía Cristopher Robin al ejecutar su venganza.

Así lo hizo con las otras dos extremidades que le faltaban, ya medio mareado el guardabosques sintió como machetazo a machetazo Cristopher Robin le cortaba la cabeza, una vez muerto el guardabosques recogió los pedazos y los guardo en una bolsa, desamarro a puerquito y los llevó de regreso a la casa de puerquito.

Una vez en la casa de puerquito acomodo a puerquito en la cama para que estuviera muy cómodo y junto a él como si fuera un rompecabezas acomodo al guardabosques, los cubrió con una sabana y se largo de ahí.

A la mañana siguiente puerquito se levanto con un dolor de cabeza horrible como si tuviera una resaca de muerte, volteó, quitó la sabana solo para descubrir el cuerpo del guardabosques cuidadosamente acomodado junto y con una nota que tenia cosida en los genitales la cual decía “el día está cerca preparen sus maletas para ir al infierno, es hora de pagar”.

Esa mañana puerquito fue a ver a poo y le dijo- te acuerdas de ese niño Cristopher Robin con el que nos divertimos?- poo contestó- que con él?- puerquito asombrado lo miro y le dijo – el ha regresado, ven a mi casa en cuanto puedas, nos dejo un regalito, poo le dijo- si en un rato voy para allá, solo déjame desayunar mi tarro de miel y ponerme mi playera roja.

Poo no alcanzaba a recordar de quien estaban hablando, levanto la mirada hacia un perchero donde estaban todos los calzones de lo niños que había violadodesde ese entonces y en el primer calzón que estaba colgado con plumón él había escrito “Cristopher Robin”

Enseguida se vistió y se dirigió a la casa de puerquito, al entrar casi vomita por el olor nauseabundo de la carne putrefacta, camino hacia el dormitorio de puerquito y ahí estaba puerquito mirando al guardabosques y le pregunto – que vamos a hacer.
Poo saco debajo de su playera una escuadra 9mm, coto cartucho y dijo – “dejad que los niños se acerquen a mí”.

lunes, 9 de febrero de 2009

AL capitulo IV

Habían pasado un par de meses desde que fui al lugar para ver si encontraba al “chaparrito, bonachón, bigotón”, la luz neón de un letrero que dice abarrotes el “Güero” me da en el rostro y me despierta tal como lo hace cada noche desde hace 6 meses lo único que conozco es el cálido destello de mi pistola cada vez que hago volar a alguien.
El diablo es traicionero, me prometió que tendría mi venganza pero en vez de eso me ha dado una serie de órdenes que me entrega Alastor para que vaya a matar a hombres que han vendido su alma, ya es costumbre ver a Abraham llevándose el alma de esos hombres directo al infierno.
Hace dos meses no me he encontrado con Loreta, solo me llama ocasionalmente para saber si estoy vivo, se ha vuelto una costumbre…, veo mi reloj y son las 3 de la mañana cuando Alastor toca a mi puerta, me paro a recibirlo y tiene un sobre rojo en la mano diferente al que usa para entregarme las órdenes de asesinato.
Me dijo -mañana será tu gran noche prepárate AL- enseguida que me dio el sobre se desvaneció en el aire, deje el sobre en la mesa y me fui a dormir, a la mañana siguiente le marque a Loreta y me mando a buzón lo cual era raro por que cuando yo le llamaba siempre me contestaba.
A la media hora me marcaron a mi celular y era Loreta pero cuando conteste me habló una voz extraña diciendo- tenemos a tu amiguita, si quieres volverla a ver ven al monumento a la revolución a la media noche, no llegues tarde imbécil.
Apenas se corto la llamada tome una ducha, me vestí y me dirigí al lugar, desde la azotea de una de las vecindades me quede observando, ya bien entrada la noche llegaron tres coches Mercedes-Benz color negro de los cuales se bajaron cuatro tipos muy bien armados de cada uno de los coches, no había ni un policía a un kilometro de distancia.
Eran las 11:30 de la noche; la hora se aproximaba, me tome mi tiempo para verificar mi arma y las municiones que traía y una vez más pensé “no hay un hombre más peligroso que el que no tiene nada que perder”, llegue a las 11:55 al monumento a la Revolución, y para mi sorpresa de uno de los coches se bajo el “chaparrito, bonachón, bigotón”, enseguida supe que era el por la manera en la que caminaba por que cojeaba por la pierna que le corte aquella vez.
Se dirigió a mi diciendo-Al verdad?- a lo cual yo respondí- alguien más aquí se llama Al? imbécil, el rió y con un ademan ordenó que bajaran a Loreta del auto, estaba amordazada y algo golpeada pero no mucho, saque un cigarrillo de mi saco, lo cual desconcertó a los guardias de este tipo, lo prendí y le pregunte- dime ¿cuál es tu nombre?, dijo- mi nombre es Larry.
Apenas escuche su nombre le dije- mira Larry, te puedes considerar afortunado ya que si bien tienes a mi amiga, que igual me importa un comino si se muere; te propondré un trato, si la sueltas no te matare esta noche, de no ser así voy a tener que matarte y a todos los patéticos mediocres que tienes por guardias.
Larry me miro y puso una extraña sonrisa y me dijo en un tono bulón- ¿matarme? Ha ha ha ha, no me hagas reír-, todavía no había acabado de reír cuando desenfunde mi arma y le metí un tiro en la cabeza al guardia que estaba junto a él, le dije- suéltala porque esta bala es para ti si no lo haces.
En vez de soltarla ordeno a sus guardias que me dispararan, no tardaron ni tres segundos cuando estaba cubriéndome de las balas de los AK- 47 que llevaban esos tipos, cada uno de ellos descargo totalmente sus armas hacia donde estaba yo, me incorpore, apunte hacia ellos y comencé a caminar, no podía darme la oportunidad de errar ni un solo tiro por que solo llevaba un cargador de repuesto así que dispare rápidamente a cada uno de esos perros mientras iba caminando, en medio del tiroteo le dispare al guardia que tenia sujeta a Loreta liberándola y le grite que corriera, Larry saco su arma y comenzó a dispararme así que también le metí un tiro en la panza, el tiroteo seguía mientras que yo solo sentía como las balas atravesaban mi carne.
Y por un minuto me permití sentir el suave beso del plomo y desear que una bala de esas me diera muerte pero no fue así, yo seguía disparando y los cuerpos de sus perros seguían cayendo al suelo agonizantes, una vez que estuve frente a Larry le apunte con mi pistola y le dije- arrodíllate- con la cara toda sudorosa sintiendo la muerte cerca me dijo ya con la respiración muy agitada- no me mates hare lo que tú quieras, en serio que quieres, dinero, mujeres; tengo chicas más bonitas que tu amiga, te puedo dar todo lo que quieras lo que te puedas imaginar, yo jale el martillo de mi arma y le dije- puedes devolverme a mi familia?- en ese momento abrió los ojos y me dijo – mira lo de tu familia se salió de control fue una prueba para entrar en la organización, ellos me dijeron que si no lo hacía iban a matarme porque sabía demasiado, ja ja puedes creerlo me dijeron eso, por eso lo hice.
En un tono de curiosidad le conteste- digamos que te ceo y te mato, problema resuelto, pero algo me huele muy mal y voy descubrir que es y a que no adivinas quien es la rata que me lo va a contar-, -quien, ¿yo?-, -así es, levántate y metete en el auto vamos a dar un paseo-, -¿y a donde vamos?-, me le acerque a la cara y le dije “al infierno”.
Le di un golpe a la cabeza que lo dejó inconsciente y lo subí a mi auto, lo deje encerrado y me dispuse a buscar a Loreta, escuche unos gritos que venían de uno de los callejones aledaños y había un par de vagos que intentaban violarla, saque mi arma y sin más le dispare en la cabeza a uno de ellos, al instante cayó muerto y su amigo al verlo salió corriendo así que le disparé en una pierna y cayó al suelo lloriqueando, me dijo – no me mates por favor tengo esposa e hijos-,yo le dije –claro yo soy un ángel misericordioso que bajo del cielo para ayudarte jaja, no muchacho ni un ángel te salvaría de esto-, apenas apretaba el gatillo cuando Loreta me grito ¡espera!, yo mire hacia atrás y vi como su esbelta figura se incorporaba del suelo y caminaba hacia mí, me dijo si lo matas te van a dar de 10 a 20 años (me arrebato la pistola de las manos y le apunto) pero si yo le disparo a este malnacido no me va a pasar nada porque conozco a todos los jueces de la zona-, dirigiéndose al vago le grito ¡¿te gusto tocarme cabrón?!, apenas dijo eso se escucho un grito ensordecedor del vago que solo fue callado por el disparo de mi arma la cual lleno de plomo el cuerpo del vago, la tome en mis brazos y nos dirigimos hacia mi auto, y le dije a Loreta - vamos a ir a mi casa a hacerle unas preguntas al imbécil éste, vigílalo y si hace cualquier movimiento extraño mátalo.
Ella tomo el arma, me miró y le apunto a Larry, lo único que atine a decir en ese momento fue – es bueno verte otra vez-, ella esbozó una sonrisa y se volteó para vigilar a Larry.

CONTINUA... CAPITULO V