sábado, 25 de julio de 2009

SIEMPRE FELIZ


Una vez más me levánto temprano con el tintineante ruido del despertador que esta mañana me resulta particularmente molesto, aún no amanece y puedo ver como la tenue luz de la del candil de la calle entra por mi ventana, hasta cierto punto es tranquilizante verla, es blanca y reconfortante y pienso cuan afortunado soy de ver ese fulgurante resplandor en mi ventana que me ha dado seguridad cada maldita mañana desde hace 20 años.
Tomo mi toalla y me meto a bañar, me veo en el espejo, noto mi desaseada barba y me doy la oportunidad de no afeitarla porque no me dio la gana, me percato de que mi pelo esta todo alborotado por la horrible noche que pase revolcándome en la cama, abro la regadera y el agua esta tibia como esa sensación que uno tiene de pequeño al acomodarse en el regazo de su madre.
Me tardo en la ducha, al salir el contraste de temperatura es lo que me acaba de despertar y me apresuro a llegar a mi cuarto porque es una mañana fría, me pongo un traje para ir al trabajo y mientras me visto me puedo dar cuenta que mi traje está un poco maltratado y algo percudido por el uso, es chistoso pero en 5 años que llevo usándolo no lo había notado, asá que termino de arreglarme tomo mis cosas y salgo de casa.
Al salir el frio se siente bien en la cara es una sensación que me alivia y deveras lo disfruto, pienso que soy un tipo afortunado porque tengo la dicha de tener el trabajo a unas cuantas cuadras y mientras voy caminando pienso en toda la gente que tiene que manejar hasta 3 horas para llegar el trabajo y que en estos días una sino es que la mayor felicidad es tener el trabajo cerca.
Llego a la oficina y una vez más veo a mi jefe que esta con una ceja levantada y el llevar tanto tiempo en este trabajo se aprende a conocer a sus superiores y uno puede saber que al tener la ceja levantada está de malas, no tengo la menor idea de porque, me permito divagar unos minutos acerca de la causa de su mal humor, pensando que tal vez su amante lo mando al diablo o se le descompuso el coche de camino al trabajo, pienso que es un poco patético que una de las pocas diversiones en mi vida es figurarme porque está enojado mi jefe.
El se me acerca molesto y me dice por que llegué tarde, veo mi reloj y noto que faltan 10 minutos para las 7 que es la hora a la que entro a trabajar, lo miro desconcertado y pienso que no tiene sentido molestarme o entablar una pelea con él, me da el trabajo del día y yo me siento en mi cubículo, prendo mi computadora que he visto desde hace 5 años y precisamente hoy la veo más bonita, saco una franela y la limpio del polvo que se le acumulo el fin de semana.
De repente levanto la mirada y ahí está Paty, la secretaria del jefe, la mujer de la que estoy enamorado y nunca me he atrevido a decírselo, ella me mira y me sonríe pícaramente yo le contesto con un buenos días, enseguida me siento en mi sillón y me pongo a trabajar delante de mi computadora y pienso en la extraña coincidencia que no he tenido sexo en cinco años, los mismo que llevo con mi computadora en la oficina, me miro en un espejo y veo que mi juventud está empezando a dejarme.
Puedo ver un par de canas, un par de arrugas, mis manos se ven maltratadas y me da tristeza haber dejado atrás mis mejores años y pienso que así debe ser la vida de un adulto un tanto aburrida, repetitiva; trabajando por un salario miserable, viviendo en un departamento con hijos, tener un coche, una esposa….a resumidas cuantas el sueño americano, el detalle es que no estamos en estados unidos, esto es México la tierra del “no se puede”, del “está muy difícil”, del menor esfuerzo, y me doy cuenta de la mierda en la que me revuelco y me resulta cómodo, creo que eso es lo peor de todo y me siento feliz con eso, por la idea de pensar que hay alguien más jodido que yo o en las mismas y se me viene a la cabeza un dicho que decía mi padre “mal de muchos, consuelo de pendejos” y pienso cuantos pendejos como yo habrá en el mundo o nomas en México.
Es hora de comer y en la cafetería están sirviendo enchiladas, un platillo que me encanta desde niño, las disfruto con tanta alegría que casi puedo sentir como me regresa la energía al cuerpo, regreso a mi cubículo a seguir trabajando, ya son las 6 de la tarde y termino temprano, le doy todo mi trabajo del día a mi jefe y me dice “buen trabajo, terminaste pronto, si quieres ya puedes irte”; en cuanto escucho eso salgo como de rayo, me despido de Paty deseando que sea mañana para volverla a ver.
Llego a casa, abro la puerta y de repente mi casa se ve tan vacía, pienso que he comprado todas esas pendejadas tecnológicas según yo para alardear con mis amigos y me doy cuenta que hace tres años que no veo a mis camaradas de juerga o por lo menos invitar a alguien a comer a la casa, me da tanta flojera lavar los traste que apenas son un vaso y un plato que ya hasta esta cuarteado porque es el que siempre uso.
Me preparo algo de comer porque ya tengo que ir a dormir sino las consecuencias de llegar tarde mañana serian gravísimas, me pongo mi piyama me lavo los dientes y me hecho a dormir, caigo como piedra rendido de cansancio, ya dormido sueño con mi propia muerte que resulta en un trágico choque automovilístico, despierto perturbado y sudando con el corazón latiendo como un loco me tranquilizo e intento conciliar el sueño una vez más sin éxito.
Al levantarme una vez más vuelvo a tener la misma rutina pero ahora molesto porque no había dormido bien la noche anterior, otra vez llego temprano al trabajo y ahí está el jefe otra vez molesto diciéndome porque he llegado tarde yo lo miro duramente como retándolo, y el solo deja caer los papeles como diciendo deja de hacerla de pedo y ponte a trabajar y así lo hago.
Para las 11 de la mañana llega Paty tan fresca y resplandeciente como nunca ella me vuelve a sonreír como de costumbre y yo le contesto con un buenos días como siempre, en seguida se aproxima a mi cubículo y me pide que valla a la oficina del jefe, una vez ahí él tiene mi expediente en la mano y un cheque de liquidación y sin más me dice “sabes que, esta compañía funciona como una gran familia feliz, y yo no te veo muy feliz así que vacía tu cubículo y lárgate a tu casa”, yo tomo mi cheque de liquidación y me dirijo a mi cubículo, me quito el saco, aflojo mi corbata y me recargo en mi sillón pensando que voy a hacer ahora.
Cierro los ojos y al abrirlos veo más claro como en cámara lenta, puedo ver a Paty muy apurada yendo de aquí para allá en la oficina, a mis demás compañeros abnegados en sus computadoras, el sonido de las teclas de sus teclados de computadora se escuchan como un martillo hidráulico, decido pararme con fuego en el corazón y la mirada encendida, voy decidido a tomar el control de mi vida el cual no lo tengo desde que nací.
Me dirijo a Paty y le digo hola, sabes desde hace 10 años que trabajo aquí te he visto y estoy enamorado de ti, la verdad no me importa si tienes novio o estas casada, la tomo entre mis brazos y la beso con toda la emoción del mundo, mi corazón late fuerte y puedo sentirlo, es una emoción que me vuelve loco, ella se me queda viendo desconcertada y me dice que también yo le gusto y que la manera que se lo dije es un tanto repentina pero que le gustó y que estaría encantada de tomar una taza de café yo amablemente le contesto que sería genial.
Me quito el cinturón y me meto a la oficina del jefe lo envuelvo en mi mano y lo utilizo como bóxer sin decir nada le propino tremendo golpe en el rostro que lo tira en el suelo, en seguida me le echo encima como perro rabioso y lo golpeo hasta que me pide que lo deje en paz, que ya le pare, hasta ese momento yo le paro, levanto la mirada y les pregunto con una sonrisa en la cara y los ojos grandes ¿Qué están viendo? ¿Saben quién soy? ¿Saben cuál es mi nombre?Lo que ven es su rostro, ven el mundo a través de mí, yo soy ustedes, soy su antipatía, soy sus deseos más profundos y oscuros, soy lo que no se atreven a decir, soy el estudiante que maldice a su profesor, soy el obrero enojado con su jefe, soy la maestra que odia dar clases, soy lo que todos piensan y nadie dice en voz alta, y mi nombre…...es difícil decirlo porque mi nombre es el de cada uno de ustedes.

sábado, 18 de julio de 2009

AL capitulo V

La humedad y el olor a sangre no se me puede quitar, me duelen las manos de torturar a Larry estoy cansado y tengo un poco de sueño, hace 20 minutos que Larry se desmayo y no me sirve de nada si esta inconsciente así que procuro amarrarlo muy bien y me voy a la cama.
Me acuesto y trato de conciliar el sueño y lo logro por un momento pero ese maldito letrero no me deja dormir, me levanto me visto y me voy a tomar un trago al bar más cercano estoy tomando un poco de whisky cuando suena mi celular y para mi sorpresa se trata de Loreta, contesto y me dice que no puede dormir y le digo que venga a donde estoy, media hora después llega al bar tan fresca y radiante como el día que la conocí, ella pide un Martini de manzana me mira profundamente y me dice, ahora te creo todo lo que me contaste acerca de tu familia y de Larry.
Yo la miro y rio sarcásticamente, doy otro trago a mi bebida y me pregunta – donde esta Larry?-, yo le respondo que está en mi casa atado e inconsciente, me mira asombrada y le digo que en este momento no le darían ganas de verlo porque no podría dormir en un mes.
Nos quedamos en el bar hasta el cantinero nos anuncio que ya era hora de cerrar, pagamos la cuenta y le ofrezco ir a mi departamento para que pueda descansar un poco, al llegar a mi departamento Alastor me está esperando en la sala, ella sorprendida se queda atónita ante la presencia de aquel sujeto, yo calmado le digo que es un conocido de confianza, después de hacer las debidas presentaciones me entrega un sobre negro como de costumbre y se esfuma.
Loreta no da crédito a lo que acaba de ver y me pide un trago para poder sobrellevar la emoción, enciendo otro cigarrillo y curiosa me pregunta acerca del sobre y cuál es su contenido, le contesto que es una orden de asesinato que viene directamente del diablo.
Se reclina sobre el sillón, suspira y me dice, - wow en verdad eres todo un personaje verdad, al lo que respondo – pero claro que no, solo soy un peón en su macabro juego, pero no me importa en tato me deje llevar a cabo mi venganza-, me siento a su lado, la abrazo y le digo que se vaya a recostar a mi cama, ella asiente con la cabeza y se va a mi cuarto, yo me quedo acostado en el sillón y finalmente me quedo dormido.
Al día siguiente me levanto del sofá y voy a mi cuarto donde Loreta está profundamente dormida, me doy media vuelta para ir a ver a Larry que se encuentra despierto y al verme se pone pálido y empieza a temblar nuevamente, le digo con voz calmada – mira te voy a quitar la mordaza para que me respondas lo que quiero, si gritas la cosa se va a poner fea como ayer y si no gritas pues todos vamos a estar tranquilos-, Larry asiente con la cabeza y le quito la mordaza y le pregunto – quien es la rata grande y gorda? y donde la encuentro; si decides no decirme por lealtad sabes que él te va a buscar y te va a matar y si decides decirme tu muerte va a ser muy rápida de cualquier manera ya estás muerto.
Me mira y me dice donde encontrarlo y me dice que su nombre su apodo “el pancho” le pregunto cuál es su nombre pero no lo sabe y le creo porque se nota el terror en su rostro, lo amordazo otra vez y me dirijo a mi cuarto para buscar ropa limpia y darme una ducha, una vez que entro para mi sorpresa Loreta esta despierta y me mira como si fuera un extraño, lo único que atino a decir es buenos días y le pregunto cómo durmió, ella me responde que es la mejor siesta que ha tomado.
Interrumpo mi idea de tomar un baño y me voy a la cocina a prepararle un almuerzo, momentos más tarde ella se levanta de la cama y se dirige al comedor donde estoy sirviendo la comida, se sienta y almorzamos juntos un rato después de almorzar en silencio me levanto y le digo que tengo que ir a tomar una ducha, me meto a la regadera y escucho como entra a la habitación y se empieza vestir, salgo de la duche y ella está sentada en la cama, me mira y me dice, - gracias por salvarme la vida, eres un hombre maravilloso, ven y siéntate a mi lado-, me mira pero ahora de una manera tierna, acaricia mi cara y me besa.
Hacía mucho que no sentía los cálidos labios de una mujer, es una sensación muy reconfortante, después de que me besa me dice que es hora de que vaya porque tiene que ir a trabajar y me dice que puedo confiar en ella ahora más que nunca la acompaño a la puerta, pide un taxi y se marcha, antes de que se subiera al taxi le pido que me avise cuando llegue a su casa y que si sospecha de alguien o de alguna cosa que me marque de inmediato o que se ponga en camino a mi casa.
Ella sonríe, se sube al taxi y se marcha, de regreso a mi habitación me doy cuenta del sobre que me entrego Alastor la noche anterior, lo abro y para mi sorpresa solamente dice entre comillas “el pancho”, aviento el sobre y me pongo en marcha al hotel en el centro de Coyoacán en donde me dijo Larry que podía encontrar al pancho.
Una vez que llegue me aproxime a la recepción le enseñe mi arma al sujeto que atendía ahí y le dije – donde está el pancho, me lo dices ahorita o en vez de matarlo a él te mato a ti-, el tipo nervioso me dijo que estaba en la suite del 5º piso, tome el elevador y subí hasta ahí, toque la puerta y me abrió un tipo flaco y alto, apenas me dejo verle la cara le apunte con el arma y le dije – donde está el pancho-, el me respondió que ya se había marchado hacia su asa en el pedregal.
Le pedí amablemente que se sentara y me platicara acerca de él, comenzó diciéndome que controlaba casi todo el crimen organizado del distrito federal y que tenía una extraña afición por bañarse en la sangre de muchachas vírgenes porque según él le daban poderes sexuales y sobrenaturales.
Por un momento pensé que lejos de que el asesinato de el pancho fuera una orden del diablo, lo iba a matar por el puro gusto de hacer a este mundo un lugar mejor para las vírgenes que todavía querían seguir viviendo.
Lo único que pude hacer fue decirle al sujeto que me platico todo esto fue dejarlo atado de pies y manos y sujeto a la cama y antes de salir de la habitación le dije –si lo que me dices es mentira voy a regresar y vas a desear no haber nacido-, e respondió que todo lo que me decía era verdad y que por favor regresara por el.Baje al lobby y le dije al sujeto que atendía ahí que no molestaran en la suite y le page 500 pesos más por las molestias del hospedaje y el asalto nervioso al que había sido sometido.